El pasado 26 de noviembre, se dieron cita en lo que fue su Parroquia “El Carpintero de Nazareth”, cientos de amigos y compañeros de fe, ruta y militancia, del querido “Pepe” De Luca.
El afecto brindado hacia su compañera de toda la vida, “Nina”, por quienes se hicieron presentes para recordarlo; no fue más que lo que ambos supieron sembrar durante tantos años.
Así se escucharon palabras, discursos y adhesiones de infinidad de compañeros; nadie quería quedarse sin expresar su respeto y cariño.
Y como (suponemos) José hubiese querido que se lo recordara, la jornada transcurrió entre música, actuaciones artísticas, grandes emociones y sonrisas; como la que siempre lo acompañaba.
Luego de la actividad desarrollada en la puerta de Caseros 2516, las compañeras y compañeros nos trasladamos (marchando por la avenida Caseros) hasta la Plazoleta de la Memoria Pastor, José De Luca,
para reinstalar las placas que fueran robadas por empleados del Gobierno de Mauricio Macri; un acto de desagravio que dio un digno cierre emotivo a la jornada.
Ahora queda seguir peleando y trabajando, para lograr que la Legislatura de la Ciudad, nombre definitivamente de esta manera a la Plazoleta ; los que lo conocimos y reivindicamos la tarea de José, hace rato la llamamos por su nombre: “Plazoleta de la Memoria Pastor, José De Luca”
Palabras expresadas por el Espacio Asambleario:
No queremos referirnos en esta oportunidad, a la actuación que le cupo a José De Luca, en cuanto a la defensa y práctica en el respeto a los Derechos Humanos. Ya muchos compañeros se ocuparon y ocuparán de contarnos sus experiencias y sentimientos.
No lo conocimos como “Chapa floja” o “Pájaro loco”; apodo cariñoso con el que lo llamaban sus compañeros de la Facultad de Teología.
Vamos a recordarlo desde nuestro lugar como vecinos del barrio en el que decidió vivir desde 1979; cuando se asentara en el departamento de la calle Brasil y 24 de Noviembre junto a Nina, su compañera de toda la vida.
Es imposible para quién haya conocido a Pepe, no haber modificado algo de su conducta de vida.
Su generosidad, sus valores humanos y cristianos; el brindarse y compartir, la capacidad de escuchar y entender pensamientos e ideologías de distintos ámbitos, hizo que muchos de nosotros hayamos aprendido a aceptar las diferencias con el otro.
Lo recordamos participando en las Asambleas Populares y en las marchas y “Cacerolazos” de diciembre del 2001 y primeros meses del 2002.
Lo vemos poniéndole el oído y el corazón a una necesidad mínima como acercarle un par de zapatillas a un desposeído; o conversar y acercarse a los jóvenes y adolescentes, desde una simple charla sobre fútbol.
Lo recordamos con su inmenso jopo y su cara de bueno, siempre ofreciendo su sonrisa y serenidad, para calmar los ánimos exaltados o las discrepancias.
Cuando el 9 de julio del 2007, colocamos la primera placa nombrando a la plazoleta de Caseros y Monteagudo, como “Plazoleta de la Memoria Pastor, José De Luca”, supo regalarnos la última nevada ocurrida en la Ciudad de Buenos Aires; quizá feliz, por que las personas que lo quieren y allí estábamos, lo hacíamos presente escuchando “La Yumba” y alguno de los otros tangos que tanto le gustaban.
Por estos y otros momentos compartidos, los compañeros del Espacio Asambleario de Parque Patricios queremos decirte: compañero y amigo, Pastor, José De Luca, estarás siempre presente en nuestra tarea y en nuestros corazones.
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